Cuando se habla de Agra, ineludiblemente, lo primero que se
nos viene a la cabeza, es que es la ciudad donde se encuentra el Taj Mahal. Sin
duda, el monumento, que observándolo, más me ha seducido e impresionado.
Como primera recomendación y muy importante, cuando se llega
a Agra en tren, como fue nuestro caso, hay que bajarse en la estación Agra
Cantonment (Cantt).
Normalmente, en los viajes organizados a la India, la opción
de Agra, suele quedarse limitada a una visita de unas horas a la ciudad y
principalmente, enfocada a visitar el Taj Mahal. Agra, junto con Delhi y Jaipur, forman lo que se llama, el triángulo de oro
En esta ciudad, nos hospedamos dos noches y lo anterior que
comenté, una ciudad de "unas horas" lo notamos en que a partir de unas ciertas horas de la tarde, ya
prácticamente no habían turistas, que la infraestructura hotelera era digamos
de albergues o mochileros y todo ello conlleva, y lo notamos bastante, una
cierta deficiencia de lugares fiables para comer ya que como había comentado en
el post de introducción a la India, hay que saber donde se come.