Para aquellas personas que amen la arquitectura moderna a niveles casi futuristas, un buen ejemplo lo tiene en la capital de Kazajistán, Nur Sultán, llamada hasta hace muy poco Astana.
El nombre actual de dicha urbe se debe a su anterior presidente, Nursultán Nazarbayev, que gobernó el país durante casi 30 años y lo supo ubicar en la órbita de las naciones más prósperas y con mayor crecimiento económico en estos últimos años. Razones que ha inducido a eso ha sido, por ejemplo, las grandes reservas petrolíferas y de gas natural que tiene dicho país.
Al igual que comentamos en el post anterior, nuestra visita en esta ciudad se limitó a unas horas de tránsito, el tiempo que hacía escala el avión en nuestro viaje de vuelta a China, tras visitar más de un mes los países del Cáucaso, y que en posteriores artículos hablaremos.
CONSEJOS BÁSICOS SI VISITAS NUR SULTÁN.
Dicha ciudad, si se desea visitar, hay que tener muy en cuenta en que época del año. Nur Sultán, por desgracia, tiene uno de los peores climas y tras la capital de Mongolia (Ulan Bator), es la segunda que tiene en inviernos las temperaturas más bajas, llegando fácilmente en meses como diciembre o enero, temperaturas que pueden bajar hasta los 30 grados bajo cero fácilmente. Su récord es de -51.
Sin embargo en verano, al encontrarse en la gran estepa del Asia Central, puede llegar a temperaturas de 40 grados muchos días.
Lógicamente una temperatura de 40 grados es mucho mejor que una de -30 y por tanto, quizá mejor dejar la visita a la ciudad para los meses estivales.
Mi mujer y yo, estuvimos de escala en dicha ciudad a finales de septiembre y ya las temperaturas eran relativamente bajas. Ese día fue entre 5 y 15 grados (veníamos de temperaturas de casi 30 grados en los últimos días en Tbilisi, Georgia) y nos limitó bastante lo que teníamos pensado visitar ya que a este hándicap, se unió también que el vuelo previo fue nocturno, con el consiguiente cansancio.
Mi mujer y yo, estuvimos de escala en dicha ciudad a finales de septiembre y ya las temperaturas eran relativamente bajas. Ese día fue entre 5 y 15 grados (veníamos de temperaturas de casi 30 grados en los últimos días en Tbilisi, Georgia) y nos limitó bastante lo que teníamos pensado visitar ya que a este hándicap, se unió también que el vuelo previo fue nocturno, con el consiguiente cansancio.
También, indicar que Nur Sultán, es una ciudad un poco especial en el sentido que hay que caminar mucho para llegar de un punto a otro, a diferencia de la otra gran ciudad de Kazajistán, Almaty, que los tramos son más cortos.
Básicamente Nur Sultán ha sido pensada como gran escaparate del gran progreso que ha tenido Kazajistán.
COMO IR DEL AEROPUERTO AL CENTRO DE LA CIUDAD.
La opción más barata es cogiendo el autobús, concretamente la línea 10. El horario de dicho autobús es de de 6:30 a 23:00, con un intervalo entre 5 y 20 minutos. El trayecto hasta el centro de la ciudad es de aproximadamente 40 minutos y el precio del bus, es de 150 tenge (unos 35 céntimos de euro).
La parada a apearse sería Khan Satyr Mall, un gran centro comercial con forma del gorro tradicional kazajo (una especial de gran carpa). Ver más información sobre dicha línea.
También, la línea 12 hace el servicio entre el aeropuerto y la ciudad pero tal vez, esta línea sea mejor a la hora de volver ya que hay algunas paradas en el destino final del trayecto de lugares a visitar que se comentará más abajo.
Los taxis, en la gran mayoría de los aeropuertos de la antigua Unión Soviética, hay que tener mucho cuidado ya que tras muchos taxistas que se acercarán a nosotros, serán piratas y nos pedirán tarifas desorbitadas comparadas con las oficiales.
Siempre hay un stand oficial al que nos deberemos dirigir pero aún así, no siempre nos darán un precio oficial. Para el caso de ir del aeropuerto al centro, pedían unos 3.000 tengge (unos seis euros). Para la vuelta, y cogiendo la wifi de un McDonalds y con la app Yandex (una app similar a Uber que se usa en muchos países de la esfera exsoviética), nos costó unos cuatro euros.
Por tanto, como conclusión general, si se desea usar la opción del taxi, hay que tener mucho cuidado ante posibles engaños.
COMO MOVERSE EN NUR SULTÁN.
Nur Sultán es una ciudad algo diferente a las que uno se puede encontrar a lo largo del mundo, destacando sus grandes avenidas (a veces “infinitas”) y también influye mucho, la meteorología. En la zona centro que comentaré más abajo, prácticamente no hay servicio de autobuses que enlacen los extremos de su “boulevard futurista” y por tanto, muchas veces, para ahorrarnos grandes distancias, tendremos que recurrir a taxis (casi inexistentes) o aplicaciones, como Yandex, que se comentó anteriormente.
Pero si hay una característica que tienen muchas ciudades exsoviéticas es que todos los coches son taxistas potenciales, es decir, que es muy fácil levantar el brazo, que seguro que alguien se ofrecerá a llevarnos al lugar deseado. Afortunadamente tuvimos esta arma, y por un trayecto de 500 tenge (poco más de un euro), nos ahorrábamos el caminar muchos metros.
QUÉ VISITAR EN NUR SULTÁN
Los principales lugares a visitar en Nur Sultan se encuentran en una gran explanada llamada Watergreen Boulevard, símbolo del progreso de Kazajistán.
Aquí indico una ruta posible:
Aquí indico una ruta posible:
Centro Comercial Khar Shatyry
Un buen punto de inicio sería el Centro Comercial Khan Shatyry, una gran superficie que hace un guiño a la tradición e historia de este país del Asia Central ya que la forma de dicho lugar es una gran carpa que se asemeja al sombrero tradicional de dicha nación.
Merece la pena entrar a dicho centro, ya bien sea para huir del probable frío que pueda haber en el exterior (como nos pasó a nosotros) o para ver la impresionante arquitectura interior del establecimiento.
En la última planta, se encuentra una piscina con playa artificial.
Watergreen Boulevard
Es la gran arteria que une los principales puntos turísticos de la ciudad, destacando su cuidada arquitectura y también naturaleza por todos lados.
La Torre Bayterek
Sin duda, es el icono que tiene la ciudad y visible desde muchos puntos de ella. Si habíamos comentado que Nur Sultán destaca por su arquitectura futurista, esta torre es el culmen de todo ello.
Su altura total es de 97 metros y el arquitecto fue el célebre Norman Foster. Lo de medir 97 metros es porque coincide con el año, 1997, que se transfirió la capitalidad del país de Almaty a Astaná, llamada así en aquel tiempo.
Palacio de la Paz y la Reconciliación
Continuando por el boulevard principal, llegaremos al Palacio de la Paz y la Reconciliación, inaugurada a finales de 2006 para el Congreso Mundial de Dirigentes de Religiones y Tradiciones. Su arquitecto fue, nuevamente, Normal Foster.
A este lugar, no fuimos ya que como habíamos indicado, la gran distancia y el frío que hacía en el exterior, hacía imposible caminar y ver todos los puntos que habíamos tenido en mente. Solo la vimos de pasada al irel taxi para el aeropuerto.
Como vemos, para hacernos una idea, es como una gran pirámide similar a la que hay a la entrada del Museo de El Louvre, en París.
El Museo Nacional de Kazajistán
Uno de los lugares que teníamos en mente, quizá el más, era el Museo Nacional de Kazajistán, que tras verlo, merece mucho la pena ya que aparte de darnos una idea de la historia de este país, también es un gran referente en la arquitectura y en las nuevas técnicas multimedia.
Destaca también su impresionante hall.
Destaca también su impresionante hall.
De hecho, tuvimos la suerte que durante nuestra visita, en el hall principal del museo, actuó un grupo musical folklórico del país, con sus particulares instrumentos de cuerda y su indumentaria.
La superficie total del museo es de 74.000 metros cuadrados, separada en siente plantas. La entrada vale 700 tenge (poco menos de dos euros) y la visita puede llevar fácilmente entre una y dos horas. El horario de visita es de 10:00 a 17:00.
Debido al frío que imperaba fuera, fue sin duda, un buen lugar para recluirnos mi mujer y yo durante nuestra estancia en dicha ciudad.
La Mezquita Sultán Hazrat
Justo enfrente de dicho museo, se encuentra la hermosa mezquita del Sultán Hazrat. No llegamos a entrar pero desde el exterior, ya pudimos hacernos una idea de su hermosa visita.
Y aquí termina nuestra crónica de los principales lugares a ver en la futurista Nur Sultán.
Como conclusión general, indicar que hay que tener muy en cuenta la época del año en que se visita. Mi mujer y yo la visitamos a finales de septiembre y llegamos a la ciudad proveniente del aeropuerto, sobre las 7:30 de la mañana y tuvimos que recluirnos para desayunar en un McDonalds (ver ubicación), situado a unos 20 minutos a pie del Centro Comercial Khan Satyry, ya que el frío era incómodo y que prácticamente, la gran mayoría de los lugares turísticos (incluido centros comerciales y museos) a visitar, abren a partir de las 10 de la mañana.
Hablando del McDonalds, tal vez pueda ser un insulto gastronómico el recomendarlo pero tratándose de este país, con una superficie de unos 2.700.000 kilómetros cuadrados (es decir, cinco veces más grande que España) y una población total de unos 17 millones de habitantes (recluidos básicamente en las grandes ciudades), está claro que es un país donde hay mucho territorio que plantar y que como en el monopolio culinario de su gastronomía, impera la carne, tampoco no debe distar mucho la calidad de las hamburguesas que nos podemos encontrar en esta cadena norteamericana de restaurantes del país, donde los kebabs y pinchitos morunos, abundan por todos lados.
También, indicar que el precio medio de un menú en dicho establecimiento, era entre 800 y 1200 tenge (entre 2 y 3 euros) cuando en España, ronda los 7 euros.
Asimismo, hay que tener en cuenta que Kazajistán es un país sin salida al mar, por tanto, el pescado es un "rara avis" en esta nación.
Y aquí termina nuestra crónica sobre Nur Sultán en particular y Kazajistán en general.
Sin duda, dicho país ha sido un descubrimiento interesante y que probablemente, la futura visita ya no se limite a unas horas en las principales ciudades sino a una estancia mayor.
Como recomendación, entre las dos principales ciudades del país, sin duda mi mujer y yo nos quedamos con Almaty, quizá por nuestro gusto por la arquitectura tradicional y con un cierto toque retro postsoviético pero Nur Sultán, si tienen opción de verla, también es interesante.
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